«Aquí todo es barato»: cubana en China cuenta su vida como sirena

La vida de una cubana en China puede ser un reto lleno de experiencias inesperadas. Para esta joven, la adaptación no fue sencilla, pero encontró una oportunidad laboral única: trabajar como sirena en un acuario.

A través de TikTok, ha contado su historia y ha generado debate en redes sobre las oportunidades en países menos tradicionales para la diáspora cubana.

Cómo llegó esta cubana a China

La historia de la vida de una cubana en China muchas veces comienza con la búsqueda de nuevas oportunidades. En este caso, la protagonista practicaba nado sincronizado en Cuba y llegó a formar parte del equipo nacional.

Su destino cambió cuando una amiga que llevaba cinco años en China publicó una oferta de trabajo en un parque acuático.

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«Soy cubana y vivo en China. Hoy voy a responder a aquellas personas que me han preguntado cómo llegué aquí. Solía practicar deportes y, cuando vi la oferta de trabajo, decidí intentarlo. No podía quedarme estancada en lo mismo, así que pensé: “Voy a intentarlo, porque este es un trabajo más serio, donde voy a poder ayudar a mi familia”», relata.

Tras enviar sus fotos y ser seleccionada junto a otras tres personas, la empresa china gestionó su documentación. «Me enviaron los papeles, los presenté en la embajada y todo salió bien. Me otorgaron mi visa rápida (express) y al llegar a China la cambié por una de trabajo», explica.

¿Cómo es la vida de una cubana en China trabajando como sirena?

Ser sirena en un acuario suena a fantasía, pero implica retos reales. No solo debe nadar con gracia, sino también compartir el tanque con tiburones y otros animales marinos.

«He nadado con dos especies de tiburones: el tiburón toro y el tiburón tigre. Hasta ahora, no me han hecho nada… ¡Miren, sigo completa!», bromea. Además, menciona que debe sumergirse en agua fría y cuidar sus oídos por la presión.

A pesar de los desafíos, decidió quedarse en China, donde ha encontrado nuevas oportunidades en el sector del entretenimiento acuático.

Adaptarse a la vida en China

Adaptarse a la vida de una cubana en China no ha sido fácil. Desde el idioma hasta la gastronomía, la joven ha tenido que aprender y superar múltiples obstáculos.

«Al principio me costó mucho la comida, todo tenía picante. Aquí condimentan hasta los dulces. Fue complicado, pero con el tiempo encontré opciones que me gustan», comenta.

Otro desafío fue la forma en que los chinos reaccionan ante los extranjeros. «Me miran mucho. No solo a mí, sino a cualquier persona morena. A veces te señalan como si fueras un extraterrestre», explica. También destaca que en China los estándares de belleza son diferentes a los de Cuba.

¿Vale la pena trabajar en China?

Sobre el salario, prefiere mantener la cifra en privado, pero asegura que le alcanza para vivir cómodamente. «Aquí todo es barato. Sí, y me sobra», dice con seguridad.

La forma de pago también fue un cambio significativo. «Aquí casi todo el mundo usa el teléfono para pagar; si no tienes cuenta bancaria en China, tu dinero en efectivo prácticamente no sirve de nada», explica. Para recibir su salario, utiliza una aplicación móvil y, si necesita efectivo, lo intercambia con ciudadanos chinos.

Curiosidades de la vida de una cubana en China

Después de casi dos años en China, la joven ha notado varias diferencias culturales sorprendentes:

• Comida inusual: «Aquí comen cosas realmente raras. A veces me pregunto qué será exactamente lo que tengo en el plato».
• Los chinos son muy sociables: «Si te ven tres veces en el día, te saludan tres veces».
• Reacciones a su trabajo: «Algunos creen que tengo un tanque de oxígeno debajo del agua y hasta sacan el teléfono como si me fuera a ahogar».

Un testimonio que inspira y genera debate

Su historia ha generado reacciones diversas en redes sociales. Algunos la felicitan por su valentía, mientras que otros critican su elección.

A pesar de los comentarios negativos, ella sigue compartiendo su experiencia con orgullo: «Yo brindo mi experiencia para el mundo. Al que le interesa, lo puede ver, y el que no, que siga de largo».

La vida de una cubana en China puede estar llena de desafíos, pero también de oportunidades inesperadas. Este testimonio demuestra que, con determinación y valentía, es posible abrirse camino en cualquier parte del mundo.