De la televisión a un negocio lucrativo: así surgieron las paladares en Cuba

¿Sabías que las famosas paladres de Cuba surgieron a partir de una novela brasileña transmitida en la pequeña pantalla de la Isla? 

A finales de los años 80 la casa productora Rede Globo del gigante sudamericano, lanzó un drama de 204 capítulos llamada Vale todo. Contaba con las actuaciones estelares de Regina Duarte y Antonio Fagundes en los papeles protagónicos y una joven Glória Pires, junto a la primera actriz Beatriz Segall figuraron como las villanas del elenco. 

La trama que lo desencadenó todo 

En esta telenovela, Duarte es una madre trabajadora que se queda en la calle después de que su hija, interpretada por Pires, vendiera su casa sin su consentimiento, para irse a la gran ciudad a triunfar como modelo. 

Regina, quien daba vida a Raquel Accioli, va tras su hija para evitar que se pierda en las malas compañías de Rio de Janeiro. Sin embargo, su hija reniega de ella y, al quedarse desamparada, Duarte monta un puesto de comida en la playa, el cual empieza a dar grandes frutos hasta que le permite abrir el primero de varios locales a los que llama “Paladar”. 

A partir de ahí continúa una trama de engaños y traiciones que hizo que el país entero se volcara en aquella novela que era un claro reflejo de la sociedad brasilera y sus problemas de corrupción y drogas. 

Empiezan las primeras Paladares en Cuba 

Aunque la novela se estrenó un par de años después en Cuba, a principios de los 2000 millones de antillanos quedaron enganchados a la historia creada de manera magistral por Gilberto Braga, Aguinaldo Silva y Leonor Bassères. 

Era un momento en el que el gobierno de Fidel Castro empezaba a tener un poco más de apertura a la creación de pequeños negocios que ayudaran al país a salir de la profunda crisis que vivía y que se conoció como “periodo especial”. 

Así que, inspirados por el éxito del personaje de Raquel Accioli, varios antillanos vieron una posibilidad de negocio en la apertura de locales donde se vendiera comida casera, enfocado fundamentalmente al mercado turístico. 

Cada vez abrían más restaurantes de este tipo a lo largo y ancho de la Isla, y a todos ellos se le empezó a conocer como “paladar”, en clara referencia a la novela brasileña Vale todo. 

Restaurantes en Cuba con precios de Ipanema 

A pesar de que los años 90 en Cuba estuvieron marcados por la escasez en todos los sentidos, no fueron pocos los cubanos que empezaron a levantar verdaderas fortunas con las paladares. 

Los precios de estos locales eran exorbitantes, por lo cual la clase media trabajadora no podía permitirse ir a cenar a uno de estos lugares, al menos no de manera frecuente. 

Como todo en Cuba, muy pronto el gobierno empezó a ver que una pequeña clase estaba surgiendo de manera abrumadora. Los dueños de los famosos restaurantes se daban “lujos” que llamaron la atención de los agentes de la seguridad y empezó el tristemente célebre “Plan Maceta”. 

Se trataba de enviar inspectores a estos paladares, de forma inesperada y si el dueño no era capaz de justificar todos los insumos que tenía en el lugar, se le decomisaba todo, incluso sus bienes personales. 

De esta forma, las paladares empezaron a cerrar en muchos lugares y muy pocos permanecieron abiertos. Prácticamente ninguno de ellos sobrevivió en el tiempo. Sin embargo, con el paso de los años y las nuevas aperturas económicas, surgieron otros lugares, mucho más caros y elegantes que las proscritas paladares. 

Algunos de los restaurantes más famosos de Cuba 

Aunque el término se ha quedado un poco obsoleto, los locales “descendientes” de aquellos primeros restaurantes inspirados en una novela brasileña, han ganado su propio espacio en la cultura de la Mayor de las Antillas. 

Aquí te dejamos algunos de los famosos hoy en día: 

1. “La Guarida”, inspirado y ubicado en el solar donde se grabó la famosa película Fresa y Chocolate, en La Habana. Suele estar muy concurrido por turistas y artistas famosos.

 

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2. El “San Cristóbal Paladar” se ubica en mismo corazón de Centro Habana, en una casa colonial llena de antigüedades y recuerdos. Esta paladar fue conocida en el mundo entero tras recibir la visita del ex presidente estadounidense Barack Obama y su familia.

 

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3.“Restaurante Sensacioones”, conocido por ser uno de los más caro de La Habana y con precios que van desde los 1200 CUP hasta los 4000 CUP, solo por un cóctel. Sin mencionar que hay platos que oscilan entre los 9500 y los 12 mil CUP, casi el triple de un salario medio.

 

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Con los precios de estos lugares, probablemente Raquel Accioli se hubiese hecho millonaria en dos meses y no en años! 

Coméntanos cuál es tu restaurante favorito en Cuba y si alguna vez visitaste alguno de los primeros paladares de la Isla.