Prepara los más deliciosos frijoles negros cubanos, siguiendo esta receta fácil y sencilla
Plato Plato principal
Cocina Cubana
Tiempo de preparación 10 minutosminutos
Tiempo de cocción 30 minutosminutos
Tiempo total 40 minutosminutos
Servings 6raciones
Equipment
Olla
Además, una paleta removedora
Cuchillo
Tabla para picar
Ingredientes
1libraFrijoles Negros
5tazasAgua(40 Onzas)
1unidadCebolla mediana
1unidadAjí verde
4unidadesDientes de ajo
1/4tazaAceite de oliva
1unidadHoja de laurel
1/4cdapimienta
1/4cdacomino molido
1cdavinagre
1/2tazavino tinto
2cdasjugo de naranja
Sal al gusto
Elaboración paso a paso
En primer lugar, lave bien los frijoles y déjelos en remojo durante ocho horas aproximadamente, posteriormente cambie el agua y viértalos en una olla con cinco vasos de agua y lleve a fuego medio, dejando hervir hasta que los granos hayan ablandado correctamente
Mientras que, se van cocinando los granos, corte en trozos muy finos y pequeños la cebolla y el ajo y sofría en el aceite de oliva.
Seguidamente, añada al sofrito el ají picado en trozos no muy grandes y deje sofreír por algunos minutos más y agregue vinagre, sal y pimienta al gusto
Una vez que hayan ablandado los frijoles, añada el sofrito y la hoja de laurel y revuelva para integrar los sabores. Tape y deje hervir a fuego medio durante algunos minutos (5 aproximadamente) a fuego lento y rectifique el punto de sal.
Asimismo, destape la olla y deje hervir hasta que el caldo de los frijoles se cuaje, y si es de su agrado retire los trozos de ají y la hoja de laurel; y en caso de que los frijoles se hayan secado mucho añada un poco de agua.
Agregue a los frijoles el vino, el jugo de naranja, el comino, revuelva y deje hervir por un par de minutos más para posteriormente verter un pequeño chorrito de aceite de oliva, revolver nuevamente y retirar del fuego para dejar reposar antes de emplatar.
Finalmente, sirva y acompañe con un poco de arroz y plátano frito, sencillamente un manjar del cielo en la tierra.
Notas
Al momento de servir los frijoles negros cubanos deben quedar enteros, cremosos y el caldo debe lucir brilloso y cuajado. ¡Disfruta!